Cada día vemos en redes sociales imágenes y vídeos de menores que no han dado su consentimiento para ello. En España se habla de legislar sobre el control de las pantallas en menores pero no cómo estos son expuestos.
La primera persona que se atrevió a denunciar este tipo de contenido fue 'Medianoche' (su nombre en redes sociales). Ella lleva siete años siendo activista contra la sobreexposición infantil en redes.
Gracias a sus publicaciones denunciando estas conductas, una de esas madres que publicaba contenido de su hijo en redes sociales, se arrepintió de haberlo hecho y puso remedio. Ella es Belén Fernández.
Belén cuenta que subía un contenido familiar a su canal y se lo tomaba como un trabajo "cómodo" con el que obtener unos ingresos. Publicaba contenido de su hijo en momentos "cotidianos".
Sin embargo, las críticas de 'Medionoche' a sus publicaciones le hizo reflexionar sobre lo que estaba haciendo. "Que te digan que lo estás haciendo mal como madre te toca las tripas. Me di cuenta de que estaba invadiendo la intimidad de mi hijo", explica.
"Mi hijo era el reclamo de mi canal, pero decidí borrar los vídeos y hacer otro tipo de contenido. Tuve que decidir entre la intimidad de mi hijo o el dinero", confiesa esta madre arrepentida. No obstante, a pesar de borrar los más de 400 vídeos del canal, la huella digital "es casi imposible de controlar".
Tuve que decidir entre la intimidad de mi hijo o el dinero
'Medianoche', vio este 'boom' de canales familiares en 'Youtube' en 2016/17 . "Era un 'reality show' con niños. No tenían ni un ápice de intimidad", comenta.
A raíz de encontrar este contenido, comenzó a investigar y se dio cuenta de que en nuestro país no se estaba haciendo nada con respecto al 'sharenting' (publicar contenido de menores en redes sociales). No ocurre lo mismo en otros países como Estados Unidos, Italia o Francia, donde, en 2019, se propuso una ley para regular este contenido.
"Lo que se persigue con estas leyes es que haya una regulación igual que tienen los niños actores o actrices. Que no salgan mostrando su intimidad, sino un trabajo puntual y que el dinero que ganen sea para ellos y no para sus padres", explica la activista.
"En España como no hay ningún tipo de regulación y se cometen una gran cantidad de abusos. Esos niños, además de mostrar toda su vida privada, protagonizan campañas publicitarias".
'Medianoche' recuerda que, pese a lo que muchos padres puedan pensar, "nuestros hijos no son de nuestra propiedad y las redes sociales no son ellos, están hechas para los adultos".