El debate sobre limitar el tiempo de consumo en establecimientos y terrazas se reabre. Esta vez no por la COVID-19, sino por la subida de precios. Nos encontramos con los vacacioneros que quieren disfrutar de su tiempo tomando algo en el primer verano sin restricciones y, por otro lado, con lo rentable que sale o no tener durante una o dos horas a alguien consumiendo un solo café.
Esta semana en Barcelona clientes denunciaban algunos récords, desde media hora para tomar una cerveza hasta vetos a parejas porque dos comensales no salen a cuenta. ¿Qué tan correctas son estas medidas? Hablamos con Luna Berría, dueña del bar Pepi&To en Bilbao, cuyo establecimiento ha llamado la atención por un cartel en el que se especifica cuánto tiempo tiene el cliente para consumir lo que ofrecen en la carta.