La guerra es lo opuesto a la belleza. Es imposible encontrar un destello en ella. La guerra es oscuridad. Por eso en esa inferioridad frente al envite de Putin, los ciudadanos ucranianos han encontrado en la dignidad una respuesta contundente, sólida y bella.
Suena 'Nabucco', de Giuseppe Verdi, interpretada por los miembros de la Ópera de Odesa. El momento lo recoge el periodista francés, Pierre Alonso. Voces y orquesta resisten en plena calle usando la única arma con la que pueden contar.
El viento mueve una bandera de Ucrania que porta uno de los presentes y allí se mantienen desafiando al frío y también a las tropas rusas que se preparan para rodear la localidad y llevar a cabo un posible asalto en las próximas horas.
