Todavía me sigue maravillando que gente que escucha la radio, que nos sigue habitualmente, haga ese esfuerzo de levantarse temprano -hoy ya estaban a las 07:00 horas a las puertas de este museo para escuchar el programa- y eso que aquí no hacemos saltos mortales ni piruetas, ni cantamos. Simplemente nos dedicamos a hacer radio, es nuestra intención.
La radio también esta Navidad descubriendo cómo se sigue viviendo más allá de sentimientos religiosos una celebración de este tipo en los primeros días del mes de diciembre.