En 'Por fin no es lunes' reflexionamos con nuestro sabio de domingo, Sabino Méndez, sobre la posibilidad de viajar y las ganas no odiar el hogar. "Todo aquel con el que hablé por teléfono en la tarde del domingo pasado, me contestaba por el manos libres de un coche. Hay ganas de salir, de cambiar de paisaje y del entorno donde transcurren nuestras vidas y nos acaba atrapando", cuenta Sabino.
Nuestro sabio insiste en que comenzamos a valorar estas cosas cuando se da una situación extraordinaria como ha sido la pandemia, en la que nos hemos visto obligados a quedarnos encerrados un largo tiempo en casa. "Esta pandemia ha servido para que nos fijáramos más que nunca en cuánto necesitamos ver caras nuevas. Saber que, incluso, a mucha distancia, nuestros semejantes están ahí. Viven, se alegran y sufren como nosotros", opina.
Por lo tanto, Sabino indica que para esta renovación, "no hay nada mejor que el viaje": "Despierta nuestra capacidad de sorpresa, alerta nuestros sentidos, pone más viva la percepción". Sin embargo, para que el viaje nos sirva para airearnos, sostiene que es imprescindible que este viaje tenga "un punto al que poder volver".