¿Alguna vez os habéis enfrentado a una casa repleta de los objetos que se acumulan durante toda una vida? ¿Os habéis planteado vaciarla?
Es una tarea titánica, y más, cuando una vez retirado todo lo emocionalmente importante... Quedan todos los muebles y las pertenencias que... Nadie sabe muy bien qué hacer con ellos.
Pues Astrid Romero, después de ayudar a una amiga a llevar a cabo esa labor, a veces desagradable y rodeada de recuerdos... tuvo una idea: ¿Por qué no montar una empresa que se dedique precisamente a esto?
Pero ella, junto con su compañera en la aventura, María López, fueron un poquito más allá, porque lo que hacen no es un simple mercadillo de todo lo que habita entre esas cuatro paredes. María y Astrid crean un recorrido por los recuerdos, crean una nueva disposición donde todo luce, donde dan importancia a cada cuchara de madera, a cada destornillador, a cada mueble. Donde honran los recuerdos para que encuentren un nuevo lugar y hagan felices a otras personas