LIBRO

Marc Marginedas: "Estoy en París asistiendo a los últimos días del juicio de tres de mis carceleros"

El corresponsal de guerra presenta: "Rusia contra el mundo: Más de dos décadas de terrorismo de Estado, secuestros, mafia y propaganda"

Blanca Lara

Madrid |

Tras la caída de la Unión Soviética en 1991, Rusia era un país empobrecido y caótico que parecía destinado a la irrelevancia internacional. Pero bajo el liderazgo de Vladímir Putin, ha recuperado una influencia que desafía el orden global. “Putin no ha cambiado. Es una persona del KGB, muy marcado por la vivencia que tuvo con la caída del Berlín. Nada más llegar empezó a cerrar TV…”, ha explicado el corresponsal de Guerra, Marc Marginedas en Por Fin.

Marginedas, que se encuentra en París asistiendo a los últimos días del juicio de tres de sus carceleros, ha relatado qué le llamó la atención de su primer día de secuestro: “En el primer día de mi secuestro tuve un incidente. Se llevaron mi pasaporte y al día siguiente llegaron dos secuestradores uno hablando árabe y otro ruso. Eran comandantes, yo me dirigí al que hablaba ruso y le dije que yo había ido a Siria a explicar el sufrimiento de los civiles y él me dio una respuesta que me dio a entender que había algo más: Tú aquí has venido dos veces y te ha salido bien, pero ahora te vamos a matar. Esa no es una respuesta de un yihadista”.

Tú aquí has venido dos veces y te ha salido bien, pero ahora te vamos a matar

Su cautiverio se alargó casi seis meses, en los que compartió celda, durante buena parte de ese tiempo, con una veintena de periodistas y cooperantes de diversos países. Tras liberación le pidió a su periódico que le mandara a Rusia porque quería aclarar lo ocurrido.

A juicio del periodista la situación actual con Rusia no se ha producido de la noche a la mañana: “La gente que ha mirado hacia otro lado para preservar intereses económicos o para iniciar un dialogo con Rusia nos ha llevado a la situación que estamos. Ha sido trasladar el problema a generaciones posteriores y hacerlo mucho más difícil de gestionar”.