Tal día como hoy hace 30 años, el 29 de octubre de 1994, debutaba en Primera División un jugador que pasaría a la historia del Real Madrid, Raúl González Blanco. A sus 17 años jugaría el primero de sus 550 partidos en la máxima categoría del fútbol español, gracias a Jorge Valdano, entrenador en ese momento y su ayudante Ángel Cappa.
Cappa se ha pasado este martes por los micrófonos de Radioestadio Noche para rememorar aquel momento: "Recuerdo perfectamente ese partido contra el Zaragoza, Raúl falló dos goles muy fáciles para él". "Era un jugador que prometía desde antes de debutar en primera. Hicimos un buen equipo en la cantera con Del Bosque de entrenador y él sobresalía", asegura.
"Yo nunca vi a un chico de 17 años tan seguro de sí mismo, tan seguro de llegar a ser lo que fue. Le veíamos una seguridad absoluta en sí mismo, una capacidad enorme para resolver fácilmente lo que era complicado y una capacidad de gol permanente", garantiza. Ángel recuerda con exactitud como se tomó la decisión de hacerle debutar: "Fueron a Alemania a jugar un amistoso, yo no fui porque me quedé con un grupo de jugadores entrenando y Valdano cuando llegó me dijo que Raúl tenía que jugar".
Raúl jugó con el Real Madrid un total de 741 partidos, convirtiéndose, hasta el momento, en el jugador con más encuentros de la historia del club, en los que anotó un total de 323 goles: "Es un jugador histórico del Real Madrid. Jugar en Primera División es difícil pero hacerlo en el Real Madrid es mucho más, es un grupo muy selecto".
Actualmente, sigue vinculado al club de su vida como entrenador del Real Madrid Castilla, equipo del que lleva al frente desde 2019: "Hay que tener personalidad, conocimiento, olvidar que fue jugador de fútbol y mirar como entrenador".
Cappa ha analizado las semejanzas que veía en el Raúl de 17 años con jugadores actuales que a su edad se están convirtiendo en las estrellas de grandes equipos como le ocurre a Lamine Yamal en el Barcelona: "Se parecen en la personalidad. Es increíble la personalidad que tienen para jugar al nivel que están jugando con una tranquilidad absoluta y un atrevimiento que llama al asombro. Lamine es más imaginativo, regateador. Raúl era más contundente, te asesinaba sin pedirte permiso".
Además, con la resaca todavía del Clásico ha analizado el sistema de juego del Barça de Hansi Flick y su línea defensiva: "El funcionamiento de un equipo es el fruto del entrenamiento. El primer equipo que yo vi haciendo eso fue el Milan de Arrigo Sacchi de los años 80 y ahora lo hizo el Barcelona con un gran atrevimiento y demostrando que eso era menos riesgoso que ponerse con los 10 jugadores al lado del portero. Siempre da la sensación de que es más peligroso pero para eso hay que tener coraje y buenos jugadores".