Sevilla se pinta de verdiblanco tras la victoria del Real Betis por dos goles a uno frente al Sevilla en el Benito Villamarín, un resultado que rompe la mala racha del conjunto andaluz que llevaba siete años sin conocer el triunfo frente a su máximo rival, el Sevilla CF. Los goles han sido obra de Johnny y Cucho que remontaron el 0-1 de Vargas.
Al término del encuentro se ha pasado por los micrófonos de Radioestadio Noche el portero del Betis, Adrián San Miguel, que se le ha visto muy emocionado e incluso con las lágrimas saltadas con el pitido final: "Estoy orgulloso porque se está dando un poco todo lo que tenía en mente. El beticismo es muy grande".
"Ha sido algo muy grande, difícil de explicar para un bético de cuna como yo. Dedicárselo a la afición, poder vivirlo en nuestra casa... Se lo debíamos a la afición, han sufrido mucho en los últimos derbis. Somos un equipo difícil de batir y eso lo hemos demostrado esta noche", asegura.
Adrián ha vuelto al equipo de su vida y vive su mejor momento deportivo a sus 38 años: "Volví a la ciudad y al club para conseguir cosas bonitas y no hay cosa más bonita que ganar un derbi. Esto es un carrusel de emociones, lo de esta noche es muy bonito pero queremos más".
Además ha valorado la situación del equipo en la clasificación: empatados a puntos con el Villarreal por el quinto puesto con plaza Champions: "No pensamos en eso ahora mismo, nos quedan muchas cosas y lo más bonito de la temporada. Tenemos una posición interesante vamos a decirlo así".