La reciente jornada de fútbol se ha visto manchada, una vez más, por el racismo y la intolerancia. Hasta tres han sido los casos vividos en un solo fin de semana: en el partido que enfrentaba al Getafe y el Barcelona, Balde, jugador culé, denunció al término del partido haber sufrido insultos racistas. Pero no fue el único, Take Kubo también sufrió diferentes gritos e insultos en Mestalla mientras calentaba en la banda. Y en Gijón, el Sporting ha expulsado a un aficionado tras proferir insultos racistas a Diaby.
Para analizar todo lo ocurrido se ha pasado este lunes por los micrófonos de Radioestadio Noche Esteban Ibarra, presidente del Movimiento contra la Intolerancia y secretario general del Consejo de Víctimas de Delitos de Odio: "Los episodios van a menos, se enfocan más pero sigue habiendo fanáticos con conductas fanáticas".
"Todo lo ocurrido está tipificado en la Ley contra la Violencia y el Racismo, pero hay otra coletilla que es la Intolerancia a lo que se presta menos atención pero es lo que más abunda y es lo que vivieron los jugadores de la Real Sociedad en Mestalla", asegura."A parte de la educación, que es el planteamiento que se suele hacer, hay que poner límites", añade.
Esteban es firme respecto a las sanciones y asegura que deberían ser más duras: "Se tiene que ver que no es una sanción que luego se recurre y se duerme en los despachos. Llamar 'etarra' a una persona también es un daño penado judicialmente. Creo que hay mucho fanatismo todavía en el fútbol, aunque cada vez se cortan más por las sanciones".