El pasado fin de semana el fútbol cadete de Salamanca vivía un incidente vergonzoso cuando un entrenador intentó agredir al árbitro, un hecho que ha sentado un precedente en el Comité de Árbitros de Salamanca que ha decidido ir a huelga y paralizar, de esta forma, la competición.
Este intento de agresión se une a un gran historial de sucesos que le han tocado vivir a los colegiados y que les han hecho decir basta y tomar medidas para finalizar esta lacra. El Delegado de los árbitros en la provincia de Salamanca, Alfonso Vicente Moral, se ha pasado este domingo por los micrófonos de Radioestadio Noche: "Esta última semana ha sido la peor que he vivido como Delegado Provincial".
"Los árbitros están cansados de algo que hemos normalizado como sociedad, que es que a los árbitros se les insulte. La gota que colmó el vaso fue lo que sucedió cuando el entrenador de Unionistas zarandeó, al término del partido, a nuestro compañero de 20 años. Él lo expulsó y la respuesta fue un cabezazo que por suerte no dejó daños físicos", relata.
"Este tipo de episodios al final lo que hacen es que te sientas indefenso y con miedo. Muchos árbitros en estas categorías son menores de edad y pensarán que por tan poco dinero no les merece la pena saltar al campo", reflexiona. "La gente tiene que entender que sin árbitros no hay fútbol", concluye.