Hace un año la Selección Femenina de Fútbol alzaba la copa de campeonas del Mundo en Sidney (Australia) por primera vez. Ya han pasado 12 meses desde el momento más importante de la historia del fútbol femenino español y que trajo consigo una revolución, en todos los sentidos, para hacer crecer este deporte en nuestro país.
Para la ocasión se ha pasado por los micrófonos de Radioestadio Noche Ivana Andrés, la capitana encargada de levantar la primera Copa del Mundo española para el fútbol femenino: "Fue mejor de lo soñado (...) El poder vivirlo con mi familia fue un gran gesto que tuvo la Federación con nosotras".
Ivana ha revivido junto a nosotros un momento que nunca olvidará y también, se ha sincerado y ha hablado de la dificultad que vivió la plantilla española durante ese año: "La preparación del Mundial, que fue el año posterior a la Eurocopa, fue muy duro. La unión y la familia que habíamos creado se rompió". "La realidad es que en el campeonato había grupos en la plantilla pero como punto positivo de las jugadoras, supimos separar esos conflictos y unirnos por un mismo sueño", asegura.
Ivana también ha analizado el cambio que se ha vivido en el fútbol femenino español ha raíz del triunfo: "A nivel repercusión, aficionados y que la gente nos tome como referente creo que ha cambiado, pero en la liga española queda mucho que mejorar en convenio, normativa e instalaciones".
Un Mundial que también quedó marcado, negativamente, por esa imagen que dejó Luis Rubiales, entonces presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), y su beso sin consentimiento a la jugadora Jenni Hermoso: "Desgraciadamente sí, porque se nos robó nuestro momento".
"A pesar de todo, ganamos el Mundial" y ese 20 de agosto de 2023 será siempre recordado por conseguir esa primera estrella para el fútbol femenino español.