El Real Valladolid vive una situación crítica en liga, es colista de Primera División y 8 puntos le separan de la permanencia pero la realidad es que las sensaciones que da el equipo son incluso peor. Esta jornada ha sufrido una "humillación" por parte del Athletic Club que ha goleado con 7 tantos a 1 al equipo vallisoletano.
Debido a la gravedad de la situación, la Federación de peñas del Real Valladolid publicó un comunicado en el que exigía el dinero de las entradas de todos aquellos aficionados que se desplazaron hasta Bilbao para apoyar a su equipo. En nombre de todos ellos se ha pasado por los micrófonos de Radioestadio Noche Mario Puertas, jefe de las peñas: "Creemos que ha llegado el momento de decir "basta ya".
"Este comunicado surge de camino de vuelta a Valladolid en el autobús al ver la frustración, el enfado y la desesperación de los aficionados. Sentíamos que teníamos que hacer algo. Con este comunicado queremos dar a ver que no importa el resultado en sí, el empatar, ganar o perder, pero lo que no se puede permitir es dejar de competir y creemos que esta plantilla lo ha hecho y ha normalizado este tipo de resultados"."Hay líneas que no se deben cruzar. No hemos esperado que el club tenga la iniciativa porque queremos que entiendan que no todo vale. El comunicado se lo hemos mandado al club, se lo hemos explicado y ellos se lo ha hecho llegar a la plantilla, esperamos una respuesta", asegura Puertas.
El Real Valladolid ha hecho llegar un comunicado de disculpa a las peñas, además el propio entrenador y algún jugador lo hizo al término del partido: "Está muy bien pedir perdón pero ha llegado un momento que no es suficiente. No se puede normalizar porque no son números que tenga este club ni el fútbol profesional. Tienen que ser conscientes que el objetivo todavía es posible y si no lo es, tienen que luchar como profesionales hasta la última jornada".
"Quien viaja lo hace porque quiere y pagándose esa entrada sin saber lo que va a pasar. No queremos sacar un rédito económico de esto, 30 euros no le va a servir de nada a la gente que ha ido", concluye.