Este domingo se vivirá un momento histórico en el Coliseum Alfonso Pérez en el partido que enfrentará al Getafe contra la Real Sociedad ya que por primera vez en Primera División habrá dos mujeres en el cuadro arbitral de la máxima categoría masculina. Marta Huerta de Aza acompañará como cuarta árbitra a la asistente Guadalupe Porras Ayuso.
Marta lleva en el arbitraje desde el 2005 y ahora compatibiliza la 1ªRFEF y la Liga Iberdrola. "Todavía no he descansado un fin de semana", confiesa. Acaba de ser madre y se ha reincorporado al arbitraje. "Entrené hasta el día antes de dar a luz. Siempre con supervisión y adaptado al embarazo. La recuperación ha sido llevadera gracias a eso". Y cinco meses después ya está de vuelta.
Felicitada por su designación confiesa estar muy contenta: "Acepto las felicidades porque todas las designaciones son bienvenidas. Estoy súper contenta y también con el trío que me ha tocado. Estar con Guadalupe que es compañera y amiga y con Yeray y Jorge". Y bromeamos por si Figueroa Vázquez tuviera algún problema que le tocaría salir: "Siempre que sales de cuarto está con la incertidumbre pero que sea por lesiçon nunca nos gusta así que esperemos que no pase nada que yo desde la banda lo disfruto mucho".
Nos cuenta que este pasado verano tuvo que compatibilizar el curso del VAR con la conciliación familiar: "El verano fui a hacer el curso de VAR y me dejaron ir con mi marido y mi pequeña. Este domingo me gustaría que estuvieran, es un momento especial y me gustaría que estuvieran ahí". Un tema complicado porque puede estar poco en casa: "La siguiente propuesta del aeropuerto va a ser Aeropuerto Marta Huerta porque estoy allí más que los pilotos. Es llegar un día y al siguiente otro avión. En septiembre llevo más de 30 aviones.
Se ve algún día como primera árbitra en un partido de la máxima categoría: "Ojalá que llegue, estaría encantadísima y para eso trabajo. Pero es muy complicado, los compañeros tienen un nivel altísimo y es difícil llegar pero estoy segura que alguna chica va a llegar". Y nos cuenta como le dio por el arbitraje: "En mi época era difícil practicar fútbol y una chica era árbitra en Palencia. Desde el primer día me gustó y sabía que iba a seguir"