Durante la entrevista con José Ramón de la Morena, señala que su marido Óscar Bautista García "se merece que cada día honre su memoria" porque "era un padrazo que todos los días jugaba con sus hijos", unos niños para los que tuvo que pedir ayuda psicológica para comunicarles la muerte de su padre, ya que "cuando a unos niños le dices algo así, sabes que les estás robando la infancia".
Además, reconoce que ha sentido "rabia, odio, rencor y todos lo sentimientos negativos", después de que "el atropello de mi marido se archiva porque se entiende que el despiste del conductor es una falta leve".