En aquella noche, De la Morena se vio obligado a hacer un programa especial para el que tuvo que subirse al autobús descapotable con la mayoría de jugadores que llevaban el pelo teñido de rubio. "Son las cosas que tiene el fútbol y las cosas del campo quedan en el campo y las de los despachos quedan en los despachos".
Para conseguir aquel equipo, bromea con que dos unos días después actuaba en La Coruña David Copperfield, al que le pedí que "ahora que somos campeones no me hagas desaparecer". Bromas aparte, dice que "fue una época preciosa, en la que nos mantuvimos arriba durante casi nueve años y probablemente debimos haber ganado alguna liga más".
De su relación con los jugadores dice que "tuve buena relación pero tampoco fui íntimo de nadie, era el presidente y seguía eso de que un padre nunca puede ser un amigo", ya que "luego había que ser serio para sentarse a negociar un contrato".
De la historia del Deportivo destaca "la Liga como el gran título y el Centenariazo como el gran partido". Otra parte interesante de su época en el Depor fue el resurgir de Jorge Mendes, que de hecho llegó a ofrecernos a Deco y a Cristiano Ronaldo.