Pau Torres era un niño cuando el Villarreal cayó en semifinales de la Champions ante el Arsenal, esa noche Pau Torres estaba en la grada del por entonces Madrigal: "Aquel día estaba en el estadio con mi familia, lloré un poco sí. Estaba en una esquina en el fondo sur, ahora por desgracia tenemos muñecos de cartón. De aquel equipo tengo fotos con casi todos y camisetas de Capdevila, Forlán. Orgullosos de ser nosotros los que peleamos ahora por entrar en la final".
"Solo he podido celebrarlo en el campo con mucha ilusión. Trabajamos desde hace muchos meses en esta competición y era muy importante certificar el pase a las semifinales y seguir creciendo", asegura un Pau que sabe que el reto en semifinales es muy complicado por el duro rival que van a tener enfrente: "El Arsenal es un gran equipo, va a ser muy difícil pero creo que tenemos equipo para estar a la altura y trataremos de llegar lo mejor posible. Seguro que el míster preparará el partido a la perfección".
Sobre el interés de grandes clubes como Barcelona o Real Madrid asegura que eso significa que está haciendo un buen trabajo pero está muy tranquilo con contrato en el club de su pueblo y hará lo máximo para ayudarles.