El 12 de Noviembre de 2020 será un día que siempre recordará Marc Cucurella. La lesión de Gayá (que sigue en la concentración) le ha abierto las puertas de la Selección y por eso ha tenido una jornada larguísima. Eso sí, con final feliz, ya que ya duerme con los futbolistas de la absoluta concentrados.
Desde Málaga ha tomado un avión a Frankfurt de tres horas. Allí ha hecho escala y ha ido hasta Zúrich, un viaje en el que tardan 55 minutos de avión.
A continuación, de Zurich ha cogido un coche hasta Basilea, un total de 85 kilómetros han tardado.