El paso de la niñez a la adolescencia de la pequeña Celia, una niña zaragozana que tiene 12 años en 1992 -cuando España estaba ensimismada con su propio éxito internacional gracias a la Expo o a los Juegos Olímpicos de Barcelona- es el eje central de 'Las niñas', la película española de mayor relieve que se presenta este año en la Berlinale. La ópera prima de Pilar Palomero cuenta, al frente del reparto, con la niña Andrea Fandos -prácticamente debutante también en la actuación- y con Natalia de Molina, que interpreta a su madre.
El personaje de De Molina es una madre trabajadora, que mantiene una vida independiente del resto de su familia, y que lucha por mantener a su hija en un colegio religioso, exclusivamente femenino. Allí, la pequeña Celia vivirá las contradicciones que suponen ser educada por un grupo de monjas de más de 60 años... mientras que la calle está plagada de la conocida campaña antiSIDA 'Póntelo, pónselo'. La cinta ha sido acogida con buenas críticas en la Berlinale, donde anoche se produjo su premiere internacional. El siguiente destino de la película es el Festival de Málaga.