El Comitéé Organizador de los Premios Feroz -los galardones a lo mejor del cine y las series que cada año votan los periodistas españoles- ha decidido otorgar este año el Premio Feroz de Honor a Victoria Abril en reconocimiento a su "incomparable trayectoria profesional", con cerca de un centenar de películas y una veintena de series de televisión. La actriz recogerá el galardón en la ceremonia de los Feroz 2021, que se celebrará el próximo 8 de febrero en el Teatro Auditorio Ciudad de Alcobendas y que se retransmitirá en directo a través de YouTube.
"Nos resulta un auténtico privilegio que Victoria Abril haya aceptado el Feroz de Honor”, asegura María Guerra, presidenta de la Asociación de Informadores Cinematográficos de España. "Es una actriz inmensa y de inclasificable talento. Su carrera es el espejo mismo de las entrañas emocionales de las mujeres españolas a lo largo de varias décadas de nuestra historia. Victoria Abril ha interpretado como nadie la vulnerabilidad, la rabia y el poder, el placer y dolor de mujeres de toda clase. La fortaleza de sus personajes son la extensión de su carisma. Ella misma es una fuerza de la naturaleza que nos ha emocionado en la pantalla, y también, a veces, nos ha hecho temblar como periodistas".
Décadas de trabajo en cine y televisión
Victoria Mérida Rojas (Madrid, 4 de julio de 1959) debutó con 15 años en Televisión Española como una de las azafatas con gafas redondas del famoso programa 'Un, dos, tres... responda otra vez', de Chicho Ibáñez Serrador. Inmediatamente, empezó a trabajar en el cine: debutó en la película 'Obsesión', de Francisco Lara Polop, y a los 17 rodó, junto a Sean Connery, 'Robin y Marian'; también hizo 'Caperucita y roja', 'Esposa y amante', o 'El puente'. En 1976 trabajó por primera vez con Vicente Aranda en 'Cambio de sexo'; con él rodó doce películas con impresionantes actuaciones, de 'La muchacha de las bragas de oro' (1980), a 'El Lute: camina o revienta' (1987), pasando por ‘Amantes'(1991) —con la que ganó el Oso de Plata a la mejor actriz en el Festival de Berlín—, 'Tiempo de silencio' (1986) o 'Libertarias' (1996).
Un año después comenzó en el teatro y dos más tarde volvió a televisión con el programa '625 líneas'. También en televisión, Abril estuvo en series míticas: 'La barraca'(1979); 'La huella del crimen' y 'Los pazos de Ulloa', en 1985, 'Los jinetes del alba' (1987), y más recientemente, 'Sin identidad' (2014-15) y 'Días de Navidad' (2019) con las que se confirma su progresivo acercamiento al audiovisual nacional tras años alejada de nuestro país. En 1982, Victoria Abril se fue a vivir a París por amor. Allí empezó otra carrera en cine y tele que le ha valido varias nominaciones en los César de la Academia del Cine francés y una gran popularidad gracias a series como ‘Clem', que estuvo nueve temporadas en antena batiendo récords de audiencia. En España, de nueve nominaciones a los Goya, logró la estatuilla como mejor actriz protagonista con 'Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto', (1995) de Agustín Díaz Yanes, que también le sirvió la Concha de Plata del Festival de San Sebastián.
También Borau, Berlanga, Chávarri, Camus, Gutiérrez Aragón, Armiñan, Félix Rotaeta o Rafael Monleón la eligieron para sus películas antes de convertirse en 'chica Almodóvar': tras hacer un pequeño papel en 'La ley del deseo' (1987), con él rodó 'Átame' (1989), 'Tacones lejanos' (1991) y 'Kika' (1993). Tras años distanciados, Victoria Abril se subió al escenario en la pasada edición de los Premios Feroz en Alcobendas para entregar al director su premio a la mejor película dramática por 'Dolor y gloria’. Victoria Abril, que lleva viviendo en París media vida y habla francés igual que español (también inglés e italiano), ha encontrado en el teatro el calor del público. Es oficial de las Artes y las Letras de Francia desde 1998 y en 2002 fue nombrada 'caballero' de la Legión de Honor francesa. Medalla de Oro al mérito en las Bellas Artes 2004, la actriz cuenta en su haber con dos Conchas de Plata del Festival de San Sebastián y recibió también en 2015 un homenaje en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG) junto con el director italiano Bernardo Bertolucci.