Con Pepa de Gea
12/05/2016 11:10
Tú y yo comiendo de la misma manera a las mismas horas e ingiriendo las mismas cantidades y los mismos alimentos no engordamos igual. ¿Por qué? Pues porque genéticamente no somos iguales y ese alimento, que es el mismo, se comporta de forma diferente en tu organismo y en el mío. Y por eso hay problemas digestivos que la medicina convencional no sabe dar una solución que si encuentra la nutrigenética. Y es que, aunque la secuencia genética de los seres humanos es idéntica en el 99,9 % de sus bases, ese 0,1 % hace que seamos muy diferentes los unos a los otros. Por eso metabolizamos de forma diferente los alimentos y tenemos una predisposición individual a engordar o a padecer determinadas enfermedades.