SERIE DOCUMENTAL | MÁS DE UNO
23/01/2023 07:28
Engañado por el capitán Manuel Rojas, e ignorando las informaciones que cuestionan la versión oficial, el Gobierno de Manuel Azaña tarda casi dos meses en reconocer los fusilamientos de Casas Viejas. La mala gestión de la crisis, unida a la utilización política de los Sucesos, provoca un adelanto de las elecciones generales, que finalmente ganan las derechas. En el juicio al capitán Rojas, celebrado en mayo de 1934, se difunde el bulo que alimentará durante muchos años la leyenda negra de Azaña: que en la represión de la revuelta anarquista, el entonces presidente del Gobierno ordenó que a los rebeldes se les dieran ‘tiros a la barriga’.