Infiltrado

Sumó la sexta victoria seguida el Deportivo. Ante la UD Las Palmas, con los goles de Sabin Merino y Bóveda. Merino ya está en números para la historia: cuatro goles seguidos en sus cuatro primeros partidos con el Deportivo. Como el fútbol es un juego, hace falta fortuna, como la que reconoció tener Eneko Bóveda en su gol, dado que aprovecha además el resbalón de De la Bella. Y todo ello aderezado por el plan de Fernando: objetivo sigue siendo portería a cero, aunque ante Las Palmas no se pudo mantener, porque Somma marcó en propia. E hizo justicia el empate de Las Palmas, dado que el Deportivo defendía muy atrás y dio el balón al equipo amarillo. Eso sí, Fernando Vázquez, en rueda de prensa, justificó esta manera de jugar y defender tan atrás, más atrás de la línea de medio del campo. Es el plan de Fernando Vázquez. De momento, ha dado resultado. Es más, incluso gana el Deportivo con Dani Giménez algo cojo. Llamó la atención que el portero no sacara en largo con la pierna. O lo hacía algún compañero o lo hacía con la mano. Según ha podido saber Onda Cero, Dani tuvo que jugar infiltrado, porque viene arrastrando molestias físicas que están afectando. Me hablan, incluso, de problemas de pubis, pero el sábado arriesgó, tanto Fernando como él, dado que Koke Vegas, aún estando en Riazor, concretó su salida al Levante el viernes. A ver qué pasa el próximo domingo en Alcorcón, dado que para entonces, el Deportivo ya podrá contar con su nuevo portero, Jovanovic. Será esta una semana de presentaciones, porque también tocará presentar al otro fichaje del viernes, el extremo Keko Gontán. Y repaso al resto de resultados del fin de semana, con domingo negro en Abegondo: perdieron el Dépor Abanca y el Fabril ante el Athletic y el Arenteiro, respectivamente. En cambio, en polideportivo, buenas victorias del Deportivo Liceo ante el Igualada (9-0) y del Leyma Basquet Coruña en Almansa (62-93).

Esta tarde se presenta en la librería Serendipia de Ciudad Real, el libro Yo Confieso, 45 años de espía, en el que Mikel lejarza, El Lobo cuenta cómo desde el interior de la organización terrorista, consiguió asestar el peor golpe de la historia de la banda: la detención de más de 200 activistas. Han pasado 45 años y después de tanto tiempo guardando silencio, ha decidido contar lo que vivió y las arriesgadas operaciones que llevó a cabo.