La signatura

Las comparaciones son inevitables. Ambos jugadores juegan en la misma demarcación y se mueven por la misma zona del campo, ambos quién es el fútbol en la cabeza las 24 horas del día, ambos son futbolistas de un carácter más o menos normal, sin estridencias sin extravagancias, muy normales dentro de lo que es este mundo del fútbol.

Viven por y para el balón y lo ven con una facilidad no apta para todos los jugadores e impropia de su edad.

Ambos fueron talentos precoces, muy pronto comenzaron a triunfar en el mundo del balón y se hicieron un sitio en el fútbol de los hombres.

Es inevitable por tanto pensar que hay mucho de Iniesta en Pedri y que hay muchas más semejanzas que diferencias por más que la comparativa con el manchego puede ser una losa para el futbolista tinerfeño.

Iniesta es un espejo magnífico donde poderse mirar, una referencia absoluta y un ejemplo a seguir tanto por su trayectoria como por su forma de ser y su filosofía de entender el balón. Nadie se parece tanto a Iniesta como Pedri, sus carreras, sus orígenes, su fútbol te llevan inevitablemente a pensar que retrocedemos una docena de años en los comienzos de la carrera del jugador de Fuentealbilla. Además Pedri tiene la gran ventaja de contar en el banquillo con otro maestro del que aprender mucho como es Xavi. Los encendidos elogios del técnico de Tarrasa hacia el centrocampista No hacen más que confirmar que estamos ante una aparición especial del mundo de fútbol, un elegido, y un futbolista que puede marcar una auténtica época. Tampoco se equivocaba Luis Enrique cuando le dió galones y peso específico en la selección apenas con 17 años y le mostró una confianza absoluta. Estamos ante un jugador especial, ante un futbolista capaz de marcar una época y por supuesto hacer girar en torno a él a todo un trasatlántico futbolístico cómo es el Barcelona o cualquiera de los grandes del fútbol europeo.

Da la sensación de que no le pesa la presión y de que juega en el Camp Nou como lo haría con sus amigos en el barrio de Tegueste

Apuesten por Pedri no se equivocarán a buen seguro que estamos ante un futbolista tan especial que no se desaprovechará su talento y él parece estar absolutamente centrado en ello.

Solo hay que mimarle físicamente no exprimirle como ocurrió la primera temporada y evitar esas lesiones recurrentes que por el calendario que le impusieron le hecho perderse tres meses de esta temporada.

Pero creo que el propio futbolista ha aprendido, ha aprendido a dosificarse y a controlar su cuerpo no excediéndose más allá de lo que debe recuperar bien, y elegir bien los partidos y los momentos en los que debe volver a jugar.

Más vale Pedri en perfectas condiciones disfrutando y haciéndonos disfrutar que un jugador desgastado, cansado y casi hasta hastiado del fútbol. De los errores se aprende y el propio Pedri ha vuelto mucho mejor que cuando se lesionó aunque parezca difícil.

Si algo le faltaba el Barcelona en la primera parte de la competición era indiscutiblemente su falta de gol, la ausencia de delanteros desequilibrantes y que marcaran la diferencia transformando muchos de las oportunidades que a veces generaba el equipo. No hace falta recordar algunas de las delanteras inéditas que presentó esta misma temporada el Barcelona tirando del filial con jugadores como Lukk de Jong, Ilias Akomach o Ferran Jutglá el pasado 2 de enero que no está tan lejos.

El equipo dominaba los partidos y controlaba la situación pero no materializaba su superioridad en el juego y apenas creaba situaciones de cierto peligro en algunos de los partidos. Tan solo Memphis al comienzo del campeonato marcó algo las diferencias de cara a la portería contraria pero con la ausencia de Ansu, la lesión de Dembele y los escasos efectivos que quedaron tras las marchas de Messi y Griezmann la delantera del Barcelona no estaba en consonancia con la categoría del equipo y no tenía la pegada que necesitaba en las competiciones.

Ahora si con los nuevos refuerzos llegados desde el mercado invernal el Barcelona intimida en ataque y tiene alternativas suficientes como para resolver los encuentros y transformar las muchas oportunidades que se están generando.

Adama, Aubameyang y Ferran torres le han dado un plus importantísimo al juego ofensivo del Barcelona y, arropados por los futbolistas que ya había, le dan además un fondo de armario suficiente como para ir rotando delanteros y que el rival no pueda contener tanto arsenal ofensivo.En los últimos tres partidos el Barcelona ha marcado 12 goles, Con un promedio de cuatro goles en cada uno de ellos y en los últimos siete partidos se ha disparado hasta los 20 tantos.

Hasta el mercado invernal las cifras goleadoras del Barcelona eran absolutamente ridículas impropias de un equipo que compite por ganar prácticamente todas las competiciones en las que participa. Ésa ha sido una de las claves más importantes de la gran transformación del equipo al igual que el toque personal de Xavi Hernandez que ha convertido a un buen equipo en una plantilla altamente competitiva y capaz de ganar a cualquier rival. La mejora es sustancial pero esto no hecho más que empezar aún le queda mucho camino por recorrer al equipo que ni siquiera asegurado la plaza de liga de campeones pero el futuro parece mucho más esperanzador que hace algunas semanas. No parece ya peligrar conseguir una de las cuatro primeras plazas y desde luego depende única y exclusivamente de mantener este nivel porque es superior al resto de los equipos con los que compite incluso el Sevilla al que podría recortarle la diferencia si mantiene esta efectividad.

Capítulo aparte merece Pedri, el centrocampista tinerfeño realizó una exhibición más frente al Athletic y nos recordó algunas de las Mejores versiones de Andres Iniesta.

Estamos ante un futbolista especial, genuino, con un crecimiento impresionante y sobre el que se puede cimentar a buen seguro un nuevo proyecto futbolístico. La vuelta de Pedri ha hecho también que todo el equipo mejore y sobre el gira buena parte del Fútbol de los Azulgranas.

Pinta mucho mejor la cosa pero esto es solo el comienzo, ya veremos el final que nos depara.

Tengo la sensación de que Dembélé empieza a ser ya historia en el Barcelona.

Es verdad que aún tiene contrato en vigor hasta el próximo 30 de junio, pero todos tenemos la sensación de que la situación ya es irreconducible y que está jugando sus últimos partidos vestidos con la camiseta Azulgrana. No hay vuelta atrás.

Además creo que tampoco es interesante ya para el club ese paso atrás para intentar reconducir una situación que se bloqueó en su momento y que ahora simplemente se sobrelleva por el interés común de todas las partes.

Al club llegados a este punto tampoco le interesa desdecirse, dar pasos atrás, y postrarse ante Dembélé, que no ha demostrado ningún interés por negociar anteriormente.

Si en su día ya le abrieron la puerta de salida y hablaron de un jugador poco comprometido en qué papel quedarían y en qué situación si le ofrecen ahora un contrato después de haber dicho que su última oferta ya se lo habían realizado.

Bastantes daño a la imagen el hecho de que Dembélé esté jugando después de que el Barcelona había asegurado que no volvería a vestir la camiseta Del equipo, como para que ahora se le ofrezca un muy interesante contrato y se le ponga un trono para que juegue algunos años más.

El futuro de Dembélé no pasa por el Barcelona.

El futuro del Barcelona no pasa por Dembélé. Afortunadamente, en la actualidad el Barcelona ha conseguido tapar muchas de las carencias y vacíos que tenía en el frente de ataque y empieza a tener suficientes alternativas, muchas de ellas bastante sólidas, como para no tener que depender tanto del jugador normando. Dembélé es ahora mucho más prescindible que cuando el Barcelona negocio antes del fin de nada del año pasado. Las apuestas a partir de ahora tienen que ser otras como Ansu, Ferran e incluso Aubameyang, por no citar directamente a Haaland, pero no, Dembelé ya tuvo su oportunidad y la desaprovechó. También Estoy convencido de que el propio francés no será muy partidario de dar marcha atrás e incluso que ya tiene algo bastante cerrado con otro equipo.

Mejor será empezar se hacer la idea de que los caminos se van a ir separando y tratar de cerrar de la mejor manera y la más digna posible la vinculación entre las dos partes. El futbolista demostrando una profesionalidad que en algunos momentos no hay ejercido en el Barcelona más de los que debería y tratar de dejar la mejor imagen y el mejor sabor de boca en estos últimos partidos que pueda disfrutar y disputar ayudando al resto de sus compañeros aunque solo sea por dignidad profesional. El Barcelona para tratar de sacar el mayor rendimiento posible de un futbolista al que está pagando y que tiene una gran calidad que puede ayudar lo suficiente como para que de aquí a final de temporada contribuya con la calidad que tiene.

Y el público entre medias tratando de disfrutar de su fútbol y mostrándole sus sentimientos, algunas veces despechados pitando y otras esperanzados animándole.

Pero el futuro de Dembélé no es el Barcelona