Desde la ONU, lanzan un mensaje de precaución. Lo ha hecho su secretario general, António Guterres que ha pedido que el mundo trabaje desde ahora para afrontar futuras pandemias ya que la de COVID-19 "no será la última" a la que nos enfrentemos.
En su mensaje por el Día Internacional ante las Epidemias, Guterres ha advertido que "las enfermedades infecciosas siguen siendo un peligro que acecha a todos los países". Por ese motivo cree que hay que aumentar la inversión en la prevención de las mismas ya que cualquier brote puede llegar a convertirse en una pandemia: "Hay que aumentar las inversiones para mejorar la vigilancia, la detección temprana y los planes de respuesta rápida de todos los países, en especial de los más vulnerables".
Además desde la ONU, piden una mayor dotación de recursos para reforzar la atención primaria y que todas las personas puedan acceder a vacunas de forma equitativa. "Sobre todo, debemos fomentar la solidaridad mundial para que todos los países estén en condiciones de frenar la propagación de las enfermedades infecciones apenan detecten un brote", ha indicado.
La COVID-19 causa unas 50.000 muertes semanales casi dos años después del inicio de la pandemia. Hasta finales de diciembre ha provocado más de 276 millones de contagios y 5,3 millones de muertes.