El Atlético de Madrid superó (2-1) este domingo al Deportivo Alavés en la undécima jornada de LaLiga, un triunfo sólido del los rojiblancos para mirar al liderato e igualar su mejor racha como local, 14 triunfos seguidos en el Cívitas Metropolitano.
Los de Diego Pablo Simeone siguen creciendo en una campaña basada en la fortaleza ante su público y un juego alegre y efectivo. El peligro de medio campo hacia arriba en el Atlético da mucho trabajo a sus rivales. Rodrigo Riquelme y Álvaro Morata firmaron sendos golazos en el primer tiempo, ante un Alavés muy flojo en ambas áreas. La de Oblak en verdad no la pisaron hasta los últimos minutos, con el 2-1 de Guevara en el descuento.
La fiesta continúa en el Metropolitano, donde ya son 14 triunfos seguidos, como logró el Atlético ya del 'Cholo' en el Vicente Calderón entre mayo de 2012 y febrero de 2013. Los locales fueron poco a poco inclinando el campo hacia la meta rival, rondando el área, hasta que en el minuto 26, Riquelme recortó a Gorosabel y mandó el balón a la red con la puntera de su pie izquierdo.
Los de Simeone bajaron en parte las salidas en tromba, pero con un Alavés incapaz de hacer nada de provecho con el balón, Molina, Griezmann y De Paul generaron más de una buena conducción. Al borde del descanso, un centro medido desde muy lejos de Koke encontró a Morata y el delantero alargó su racha con calidad.
Otro recorte y otro golazo de un Atlético que siguió cómodo en el segundo tiempo. La faceta defensiva supo contener a un Alavés que, pese a los cambios, no tuvo su primera ocasión de gol hasta el minuto 84. Hagi, uno de esos refuerzos, rozó el poste de Oblak, pero los locales no sufrieron en bloque bajo, a la desesperada el rival hasta hacer el 1-2 ya demasiado tarde, en el 96'
Los de Luis García, que venían de dos buenos empates ante Villarreal y Betis, buscaron su momento en el tramo final, pero los del 'Cholo' no regalaron, con un equipo que mantuvo la intensidad con la entrada al descanso de Marcos Llorente. El internacional español dio su profundidad y generó el que pudo ser el tercero de la noche, de Antoine Griezmann, pero el árbitro lo anuló por falta.
Simeone no dejó que se relajaran los suyos, con la complicidad de una grada acostumbrada a ver ganar a su equipo: 14 seguidas. El Atlético guardó el balón aunque tuvo unos segundos de suspense con el 2-1 y el Alavés, desfondando de tanto correr a remolque, se marchó de la capital pendiente de la zona de descenso. El equipo rojiblanco sumó así 25 puntos, a tres del liderato que comparten Real Madrid y Girona, pero con un partido menos.
