Complicado debut del Atlético de Madrid en la Champions ante un gran Oporto que ha sido un hueso muy duro. Se pudieron adelantar los rojiblancos gracias a una gran ocasión de Luis Suárez a los seis minutos que desvió el portero luso Diogo Costa, la mejor del equipo rojiblanco, luego atascado e incluso inquietado en ocasiones por el rival portugués.
Tanto fue así, que el lateral nigeriano del Oporto Zaidu se llegó a plantar solo en el área rojiblanca en el minuto 27 tras una pérdida del francés Thomas Lemar, sustituido diez minutos después por lesión, pero el medio centro rojiblanco Geoffrey Kondogbia le rebañó el balón en el área llegando por detrás, una acción revisada por el videoarbitraje, que no encontró nada punible.
En la segunda mitad no cambió mucho el panorama. Nos dejó la vuelta de Griezmann con división de opiniones en el Metropolitano. Sustituyó a un Joao Felix que ha pasado totalmente despaercibido.
Y pudo ser peor. Tras un error clamoroso de Lodi, Taremi marcaba para los lusos. Se iban a salvar los de Simeone porque rozó el balón con la mano y tras la intervención del VAR, el tanto no subió.
Mbemba se fue expulsado en el último minuto por una entrada a Griezmann cuando iba en dirección a la portería. La falta la botaba Suárez y se marchaba por muy poco por encima por lo que se quedó el empate a cero inicial.
En el otro encuentro del grupo, el Liverpool se ha impuesto 3-2 al Milan. Los italianos llegaron a dominar 1-2 pero el equipo de la Premier le dio la vuelta gracias a los tantos de Salah y Henderson. Brahim marcó el segundo tanto milanista.