El Getafe, con la eclosión definitiva de Mason Greenwood como un jugador de primer nivel, agudizó la crisis del Almería, último de la clasificación, sin victorias esta temporada y hundido por su incapacidad para concretar sus periodos de buen juego con aciertos que le habrían permitido pelear por una victoria (2-1) que se llevó el conjunto azulón a base de golazos.
El inglés ya dejó muestras de su innegable calidad en anteriores jornadas, pero necesitaba firmar un partidazo para cerrar el círculo y volver a ser el jugador que deslumbró en el United con apenas 18 años. Y fue el Almería el equipo que tuvo la mala suerte de ser la víctima del definitivo regreso de Greenwood, que cambió el rumbo del partido con un auténtico golazo.
Pero antes, el equipo andaluz sacó de quicio al Getafe. Por lo menos, durante los primeros veinte minutos, en los que pudo sentenciar el choque. Los hombres de Gaizka Garitano saltaron al terreno de juego con ganas de acabar con una racha terrible. Marcaron terreno y entre Embarba, Arribas y Ramazani dejaron sin argumentos al cuadro madrileño.
Precisamente, fue Ramazani quien se encargó de abrir el marcador para ilusionar a sus compañeros. El jugador belga, a los siete minutos, aprovechó un córner para batir a David Soria tras una peinada hacia atrás de Chumy. En sólo tres toques, el Almería sacó los colores a la defensa del Getafe, que después se salvó de milagro de recibir el segundo. Baptistao, inexplicablemente, mandó a las nubes un rechace de Soria cuando tenía toda la portería para aumentar la renta del Almería.
Hasta ese momento, el Getafe andaba despistado, fuera de lugar y muy poco competitivo. Tuvo que aparecer Greenwood para desarmar al Almería. Siempre eléctrico, casi el único con criterio y desborde, se echó a su equipo a la espalda para acabar con la incertidumbre el Coliseum.
Primero avisó con un lanzamiento que sacó como pudo Maximiano. Después, lo intentó con un cabezazo que se marchó por encima del larguero. Y, a la tercera, dio en la diana. Greenwood se acomodó un pase largo de Alderete pegado a la línea de la banda derecha. Se deshizo de Akieme con un regate hacia dentro y soltó un latigazo espectacular que se coló por la escuadra derecha de la portería defendida por Maximiano.
Greenwood dejó su sello. Por fin. Sumaba tres goles este curso, pero dos en Copa ante un equipo menor como el Tardienta y otro en Vigo tras empujar a la red un pase de Borja Mayoral. Necesitaba un gol así para completar su recuperación y, ya de paso, para empujar al Getafe, que despertó y antes del descanso volvió a marcar por medio de Borja Mayoral. Insaciable este curso, hizo su octavo tanto en Liga con un gran remate que acabó con el Almería.
La suerte estaba echada para los hombres de Garitano. El 2-1 no era definitivo, pero el golpe fue duro. En la segunda parte ya no se pudo levantar e incluso se salvó de la goleada.
El larguero con el que se encontró Óscar y el acierto de Maximiano ante Borja Mayoral en un mano a mano, evitaron un resultado más abultado que habría hecho más daño a un equipo que seguirá en la UVI. Mientras, el Getafe ya sonríe en el ‘top 10’ de la Liga tras encadenar ocho partidos sin perder.