Almería y Mallorca han demostrado este domingo en el Power Horse Stadium almeriense su posición en la tabla por la falta de gol, en un partido en el que el equipo de Javier Aguirre tuvo más y mejores ocasiones para romper un empate que no le sirve a los locales y que sí que da más tranquilidad a los baleares.
En la primera parte, se ha jugado a lo que ha querido el equipo de Aguirre, que ha manejado el balón, partiendo desde la presión alta y las imprecisiones de un Almería que no fue capaz de sacar el balón con solvencia desde atrás, buscando siempre el balón en largo, pero sin encontrar referencia arriba.
El conjunto balear, aprovechando la poca fluidez almeriense en la salida de balón, tuvo la primera ocasión en el 7, en un balón de Antonio Sánchez a la espalda que Cyle Larin cruzó demasiado.
El futbolista canadiense mantuvo en jaque a la zaga local, incapaz de sacar el balón controlado, todo lo contrario que el equipo de Javier Arguirre, que fue el que tuvo el control de juego con llegadas sin encontrar portería. En el 21, un balón de Antonio Sánchez para Darder acabó con disparo del centrocampista bermellón que logró despejar Chumi, pero sin encontrar otra opción que la de salir corriendo, sin lograr pasar desde el centro del campo.
El partido estaba en poder del equipo balear, diversificando sistemas, para condicionar el juego, muy trabado en los inicios, con acercamientos mallorquinistas protagonizados por la aportación de Cyle Larin y los errores a la hora de cerrar los espacios al canadiense, acudiendo a rematar los servicios de Antonio Sánchez y de Maffeo.
Mientras, la UD Almería no consiguió, en ese tiempo, meter el balón más allá del centro del campo. A partir de esa línea, el equipo indálico careció de acierto, siempre utilizando el pase en largo para tratar de encontrar el camino, pero sin generar acciones de peligro en ataque. Leo Baptistao, en el 35, protagonizó el primer disparo que se marchó fuera.
En la respuesta inmediata, otra acción de Antonio Sánchez acabó con servicio de éste al segundo palo por donde Samú Costa buscó el gol que evitó Luis Maximiano, que despejó a saque de esquina, tal y como lo hizo en el 38, en una acción del canadiense Larin que no tuvo el acierto necesario para adelantar a su equipo.
El cuadro almeriense seguía sin asomarse, sólo lo intentó antes del descanso con una acción de Embarba y Leo Baptistao, con disparo del brasileño que detuvo sin problemas Rajkovic.
Con los cambios de Garitano, en el descanso, también cambió el dibujo, pero la primera ocasión llegó en el 53, en un remate de cabeza de Samú Costa que se fue fuera por muy poco, mientras que el posterior disparo, en el 56, de Cyle Larin, que controló el balón y disparó, lo controló Luis Maximiano en los mejores momentos de la UD Almería, con acciones a balón parado que no ocasionaron peligro, casi siempre encontrándose con una bien plantada defensa bermellona, que se atoró, dando un paso atrás.
Plana en su juego, la segunda parte continuó con el crono avanzando en contra de los intereses indálicos. Garitano dio entrada a Lázaro Vinicius que recibió un buen servicio, en el 81, pero se recreó en la suerte y Gio González se anticipó para evitar el disparo del brasileño a gol, con respuesta bermellona en el 89 y mal disparo de Llabrés cuando lo tenía todo para marcar.