Tras 16 años de blanco, Sergio Ramos comenzará a vestir de azul esta temporada. Cambia Madrid por París, el Bernabéu por el Parque de los Príncipes y la Liga española por la Ligue 1 francesa: tras pasar ayer el reconocimiento médico, Sergio Ramos ya es nuevo jugador del Paris Saint Germain, equipo con el que firma para las dos próximas temporadas, hasta junio de 2023.
El conjunto galo ha hecho hoy oficial el fichaje del central español después de que ayer, un error en su página web, ya desvelase su incorporación. El PSG publicó este miércoles en su web durante unos minutos una noticia en la que se podían leer unas declaraciones de Sergio Ramos mostrando su alegría por portar el dorsal número 4 en su camiseta con el Paris Saint Germain. En ese mismo texto aparecían frases de Sergio Ramos aludiendo a su llegada al club parisino y a su dorsal.
Sergio Ramos llega a un conjunto parisino que está revolucionando el mercado de fichajes con el objetivo de pelear por la Liga de Campeones. Pochettino ya tiene a sus órdenes a futbolistas como Wijnaldum o Achraf, se espera la llegada de Donnarumma… y veremos si ficha alguna otra gran estrella en caso de que salga Mbappé.
El centro de la defensa del PSG ha tenido hasta ahora dos fijos como Marquinhos y Kimpembe, así que con ellos tendrá que pelear el camero por un puesto en el equipo. Ramos también podría tener encaje junto a ellos en un sistema de tres centrales, una apuesta que podría valorar Pochettino al tener a carrileros de largo recorrido como Bernat o Achraf.
Su salida del Real Madrid
Ramos afronta esta nueva etapa tras salir de un Real Madrid en el que ha sido toda una leyenda: 16 temporadas liderando un equipo de época con el que ha conquistado cinco Ligas, dos Copas del Rey y cuatro Ligas de Campeones. Un líder dentro y fuera del campo.
Eso sí, su última temporada no ha sido la mejor. Ramos ha estado lastrado por las lesiones, ha pasado el coronavirus, no alcanzó un acuerdo para renovar con la ya famosa caducidad de la oferta… e incluso se quedó fuera de la lista de Luis Enrique para la Eurocopa. Ahora, en París, el sevillano tiene la oportunidad de demostrar que le queda cuerda para rato y que sigue siendo uno de los mejores centrales del mundo.