Madrid se ha teñido de blanco este domingo para acompañar a los futbolistas en los actos de celebración de la decimoquinta Copa de Europa lograda por el Real Madrid en la noche del sábado en Wembley ante el Borussia Dortmund.
Los campeones llegaron de madrugada a Madrid y durante la tarde del domingo acudieron a los tradicionales actos con las autoridades en la Catedral de la Almudena, la Real Casa de Correos y el Ayuntamiento de Madrid, donde fueron recibidos por Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez Almeida.
Tras visitar las distintas instituciones los futbolistas de la primera plantilla se subieron a un autobús descapotado para celebrar junto a su afición hasta llegar a la Plaza Cibeles, donde había preparado un escenario desde el que hablaron protagonistas como Carvajal, Vinicius, Bellingham o Toni Kroos, que se despidió de la afición madridista cediendo su dorsal número '8' a un emocionado Fede Valverde.
El capitán, Nacho Fernández, se subió para poner la bufanda a la Diosa y ofrecer el trofeo de campeón de Europa a la Cibeles dejando una icónica imagen junto a Modric, Carvajal y Kroos, futbolistas que hicieron historia en Wembley igualando el récord histórico de Paco Gento como jugadores con más Copas de Europa en toda la historia.
Posteriormente volvieron a subirse al autobús para llegar hasta un Santiago Bernabéu lleno a reventar donde celebraron el fin de fiesta junto a la afición madridista.
Ya en el estadio madridista, los futbolistas fueron saliendo a un escenario situado en el centro del campo uno por uno ante la ovación de una afición entregada, especialmente con sus capitanes. Modric confirmó que seguirá en el club la temporada que viene, Nacho no dio pistas sobre su futuro y Kroos fue protagonista al recibir el último adiós de los aficionados merengues.