El agente de Policía Local de Almería habría contactado vía Skype con la supuesta proxeneta, y hermana de una de las víctimas, "haciéndose pasar por agente de la Guardia Civil" para obtener servicios sexuales con dos de las menores.
Las actividades investigadas habrían tenido lugar durante el periodo más estricto del confinamiento por el covid-19, desde marzo de 2020. De hecho, una de las menores fue identificada por agentes de la Guardia Civil en el interior de un vehículo con un presunto cliente, también investigado. Ambos fueron propuestos para una sanción administrativa por saltarse dicho confinamiento, por lo que el policía local de Almería se habría puesto en contacto con el puesto de la Guardia Civil que emitió la sanción para "interesarse" por la denuncia que finalmente no habría llegado a tramitarse.
Las menores habrían sido "presionadas" para que salieran de casa "en pijama" para ser recogidas por los clientes.
La principal procesada habría reconocido haber facilitado un servicio a un agente de la Policía Local de Adra. La mujer habría conducido a una de las menores hasta la localidad abderitana a pesar de que la menor no quería mantener relaciones sexuales.
El propio Ayuntamiento de Almería ha solicitado información sobre las diligencias practicadas para adoptar, si procede, cualquier actuación. La continuidad del Policía Local dependerá de la información oficial que le sea trasladada al consistorio.
Desde el Ayuntamiento de Adra confirman que el agente investigado fue apartado del servicio nada más tener conocimiento de las detenciones.
Hay un total de diez procesados. El caso está en manos del Juzgado de Instrucción número 2 de Almería. La juez instructora ha decretado la situación personal de libertad provisional de los procesados, eso sí con la obligación de comparecer ante el tribunal y mantener el alejamiento con las víctimas.
