Massimo Pozzi llegó a El Puerto de Santa María en 2010 para abrir su Heladería y Yogurtería Artesanal 'Da Massimo'. Con varios premios a sus espaldas por la calidad de sus helados -y de su servicio-, siempre ha tenido como prioridad crear empleo en el centro de El Puerto. Una apuesta por la ciudad que también hizo el joven David Castro, que inauguró su apuesta 'Dhoma' en la calle Misericordia en 2019. Una fusión de lo mejor de la cocina japonesa con el alma de los productos gaditanos que ha tardado poco en convertirse en una de las primeras opciones en el consumidor que quiere sumergirse en una experiencia de comida japonesa.
Ambos dos, jóvenes y con espíritu emprendedor, han tenido que reinventarse ante el coronavirus. En una entrevista en el programa Más de Uno Bahía de Cádiz, hemos conocido sus historias de reinvención ante el coronavirus y cómo afrontan la lenta desescalada de las medidas de restricción del coronavirus. En el caso de Massimo su negocio de helados no ha sufrido tanto como la cafetería que tiene en la céntrica calle Luna, que es donde ha notado la dureza del coronavirus y sus consecuencias sanitarias. David sin embargo tuvo que adaptar un modelo de negocio sustentado en la atención y en la experiencia inmersiva en la cocina a una filosofía de comida para llevar.
Tanto Massimo como David han ido adaptándose con rigor a las medidas que la Junta de Andalucía determinaba cada semana y cada mes para la hostelería. Ahora, miran con esperanza la reapertura de las fronteras provinciales y esperan que poco a poco se pueda retomar el pulso previo a la pandemia. Para ello, han volcado la totalidad de sus esfuerzos en garantizar que la experiencia en sus locales sea segura: implementando medidas y protocolos estrictos, Massimo y David representan la mejor cara de la hostelería portuense: una ciudad que tiene en el buen comer una de sus mejores cartas de presentación.
