Este jueves a mediodía se ha celebrado en Algeciras una concentración en repulsa al ataque que un hombre de nacionalidad marroquí cometió en dos iglesias de la zona. El joven de 25 años asesinó con un machete de grandes dimensiones al sacristán de Nuestra Señora de La Palma, Diego Valencia, e hirió de gravedad al vicario salesiano Antonio Rodríguez de la iglesia Santa María Auxiliadora y a otras tres personas.
Centenares de personas se han unido a esta concentración que fue convocada por el Ayuntamiento de Algeciras, en la que se han guardado 5 minutos de silencio en memoria a la víctima moral y en apoyo a los heridos. Además, se ha declarado un día de luto oficial por el ataque.
Al acto también han acudido autoridades y representantes políticos y ha estado encabezado por el alcalde, José Ignacio Landaluce, y el párroco de la Iglesia Nuestra Señora de la Palma, Juan José Marina.
Diego Valencia era una persona buena, cariñosa y que todas las mañanas tenía un saludo, una propuesta
El alcalde ha confirmado que cuando se acercó a ver al padre Antonio, el cura herido que oficiaba misa en la Iglesia de San Isidro, fue a la plaza alta y halló el cuerpo sin vida de Diego Valencia, al cual ha definido como "una persona buena, cariñosa y que todas las mañanas tenía un saludo, una propuesta".
Landaluce ha añadido: "Convivimos 129 nacionalidad distintas en Algeciras. Hasta ahora siempre ha sido en paz, en armonía y con respeto. Debe seguir siendo así, debemos de evitar que prenda cualquier tipo de mecha que no queremos".
