El Consejo de Administración de la Empresa Municipal de Movilidad y Aparcamientos de Cádiz (Emasa) ha aprobado esta mañana la cuenta general del ejercicio 2020, con los votos favorables del Equipo de Gobierno y del PSOE, el rechazo del PP y la abstención de Ciudadanos. Esta aprobación se produce apenas 38 días después de que tanto el PP, como el PSOE y Ciudadanos votaran en contra de esas cuentas “sin argumentar razones para desestimarlas”, como criticó en su día el presidente del Consejo y concejal delegado de Movilidad, Martín Vila, que acusó a la oposición de “boicot”.
Hoy Vila mantiene lo dicho entonces “puesto que las cuentas siguen siendo las mismas y ya el mes pasado se demostró que la empresa es viable, nada ha cambiado. Incluso para ampliar la información a los consejeros, y sin que fuera necesario, se informó en dicha reunión de la situación real de la sociedad en 2021, demostrando que la empresa ha mejorado incluso la cifra de negocio de 2019, por lo que lejos de verse en peligro, tiene la previsión de cerrar el presente ejercicio con superávit”. Todo ello en un año en el que durante el primer trimestre hubo restricciones a la movilidad.
Es por ello que lamenta el “paripé” realizado por la oposición hace un mes, “poniendo en peligro a la empresa con ese injustificado bloqueo”. En este sentido, el presidente critica especialmente la actitud “irresponsable” del PSOE, “que una vez más vuelve a demostrar que su única preocupación, como oposición, es ralentizar y poner palos en las ruedas a la gestión del Equipo de Gobierno”. De nada ha servido, según palabras de Vila, que la consejera socialista, Natalia Álvarez, haya propuesto, “para disimular”, crear una Mesa de Viabilidad de Emasa. “Su propuesta ha sido rechazada por el representante de los trabajadores, que ha ratificado, tal y como ha acreditado la dirección de la empresa, que Emasa es viable, añadiendo además que este tipo de peticiones genera una incertidumbre innecesaria dentro de la compañía”.