La Asociación Española de Municipios del Olivo, AEMO, que reúne a más de 130 pueblos, ciudades y diputaciones de España y que actualmente preside el Ayuntamiento de Montoro ha emitido un informe en el que se asegura que los costes de producción del aceite de oliva se han incrementado más del doble. La causa se encuentra en la sequía que ha reducido la producción a la mitad y ha pasado de 1,5 millones a 750.000 toneladas.
Los olivareros aseguran que los costes de producción se han elevado y aseguran que no están ganando más dinero por unos precios que auguran seguirán altos en tiendas y supermercados, donde la compra de aceite se ha reducido en un 40%.
Los costes de producción tanto en el campo como en la almazara el informe marca una subida de los costes salariales del 9% y una subida de inputs agrarios como fertilizantes y fitosanitarios superior al 70%. La energía ha experimentado un incremento del 40%. Si a esto se añade el coste de las distintas tareas de cultivo supone que el precio unitario se eleve hasta un 32%.
El informe concluye que el coste medio ponderado de producción de un kilogramo de aceite de oliva ha pasado de 2.42 euros en 2020 a 3,20 en 2023. En la campaña pasada (22/23) y en la actual, que acaba de comenzar (23/24), la producción española ha sido y será de la mitad de un año normal, entorno a 750.000 toneladas, lo que resulta determinante en en los costes.
Los olivicultores han de mantener gran parte de las labores de cultivo, tales como la poda, la fertilización, el mantenimiento del suelo, los tratamientos fitosanitarios, el riego en su caso y la recolección. Con la situación actual de elevación de los costes, producir un kilo de aceite de oliva es un 94% más caro.
AEMO se aclara que estos son costes medios ponderados, ya que "varían según el sistema de cultivo del olivo", pues en "el tradicional de montaña" el coste de producción por cada kilo de aceite puede llegar a los diez euros, una cifra que es inferior en "el cultivo en seto, pasando por el tradicional de baja pendiente y el intensivo". Cada uno tiene sus costes, "pero todos se han elevado en mayor o menor grado, y los costes medios ponderados han sobrepasado holgadamente el 100% desde la campaña 2020 hasta la campaña 2023".
Estos cálculos "vienen a ratificar que, a pesar de la severa subida del precio del aceite de oliva en origen, los olivareros no se ven beneficiados en sus cuentas de explotación, puesto que aún habiéndose liquidado el aceite en España a una media de 5,85 euros el kilo en origen, los costes medios superan ese valor al suponer hasta 6,22 euros el kilo. Es decir, los altos precios del aceite de oliva en el mercado no compensan la subida de costes y la elevación de los mismos derivada de la baja cosecha".