Con una mesa informativa ubicada a las puertas de la nueva sede colegial, el grupo de trabajo de las matronas del Colegio Oficial de Enfermería de Córdoba se ha querido sumar esta tarde a la celebración del Día Mundial de la Muerte Gestacional, Perinatal y Neonatal, que se conmemora el 15 de octubre de cada año para recordar las pérdidas de los bebés cuyas familias estaban esperando y no llegaron, o llegaron y no se quedaron.
Con esta mesa, el Colegio cordobés ha querido visibilizar la realidad de las familias que viven un duelo perinatal y sensibilizar a la población en torno a este tema, a la par que mostrar el apoyo de las matronas y enfermeras cordobesas a estas familias, «y promover mejoras en la atención que brindamos a las personas afectadas», como ha afirmado Eva Sánchez, referente del citado grupo de trabajo, vocal de la Comisión Plenaria del Colegio y matrona del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba.
El duelo perinatal es aquel que se produce tras la pérdida de un bebé durante el embarazo o en los momentos previos o posteriores al parto. En España, la tasa de mortalidad perinatal en 2021 fue de 4,39, según datos del INE, lo que supone que en torno a 90.000 mujeres sufren al año la pérdida de un embarazo o un bebé en etapa perinatal. El duelo perinatal es un proceso antinatural, donde la vida y la muerte se dan de la mano, que está lleno de estigmas y tabúes. «Urge visibilizar este proceso y romper con el estigma para que las familias que sufren esta pérdida puedan sobrellevarla de la manera más saludable posible y para que los profesionales podamos acompañarlos adecuadamente en su dolor», explica Eva Sánchez.
Por ello, las matronas y enfermeras han querido unirse a esta celebración mediante esta mesa informativa, en la que cuatro matronas cordobesas han explicado activamente a los ciudadanos, en representación de este colectivo, las principales cuestiones en torno al duelo perinatal, en una iniciativa que ha contado con el interés de cordobeses de diversas edades y de la propia vocal en Córdoba de la Asociación Andaluza de Apoyo al Duelo Perinatal (Matrioskas), que también ha visitado esta mesa.
Las matronas y enfermeras cordobesas también han aprovechado para manifestar:
• Que el duelo por el bebé no nacido es un sentimiento real con implicaciones en la salud física y mental de las familias que lo sufren y que tiende a ser invisibilizado y no tratado.
• Que el duelo de cada familia es único y que en ocasiones necesita asistencia sanitaria especializada.
• Que el puerperio de la madre que ha perdido un hijo durante el embarazo o en torno al parto debe ser atendido específicamente con la complejidad que supone.
• Que los posibles futuros embarazos de estas familias requieren un acompañamiento especial.
Por todo ello, las matronas y enfermeras cordobesas también solicitan:
• Formación específica para los profesionales que acompañan las pérdidas perinatales.
• Creación y mejora de protocolos en atención hospitalaria sobre muerte gestacional, perinatal y neonatal, estandarizados y consensuados a nivel nacional.
• Promoción de unidades de seguimiento específico de atención al duelo perinatal en los servicios de atención primaria, unidades de salud mental así como en obstetricia y ginecología.
• Atención sanitaria respetuosa con las familias afectadas con la intimidad, el tiempo y el espacio adecuado para ello.
• Concienciación social para que todas las personas que traten a estas familias lo hagan con la sensibilidad y empatía necesaria.
Igualmente, estas profesionales cordobesas y el propio Colegio de Enfermería de Córdoba quieren mandar su apoyo a las familias que sufren estas pérdidas y agradecer a los profesionales que trabajan día a día por prestar la atención que merecen.