Onda Deportiva Granada, jueves 19/9/24

El Granada CF vela ya armas para el partido de mañana ante el Málaga CF en el estadio de Los Cármenes. El partido es importante, como todos los partidos, aunque este llega rodeado de grandes tintes de cierta necesidad. El conjunto malacitano es un cuadro incómodo, muy bien dirigido por un entrenador que sabe lo que se hace, Sergio Pellicer, y llega a este duelo con grandes dosis de ilusión, en virtud de su reciente ascenso a segunda división. Unas ganas por consagrarse de nuevo en el fútbol profesional que no siempre tienen los equipos que juegan con otros objetivos y que participan en esta Liga después de fracasar en la campaña anterior. Pero más allá de las cualidades del rival, un equipo cuajado de jugadores jóvenes formados en la cantera blanquiazul, el equipo rojiblanco deberá luchar y vencer a sus propios demonios. Guillermo Abascal debe elegir a los hombres más adecuados para ofrecer el rendimiento necesario, a los mejores y que mejor lo han hecho cuando se confía en ellos. Por desgracia, no siempre el técnico sevillano está dando con esa tecla. Y el segundo asunto, no menor que el anterior, es el del ambiente. La afición, con independencia de que nadie les niega su derecho a protestar, porque seguramente tengan razón, tiene que animar sin parar al equipo y sus futbolistas. En esta situación de crisis, el resultado es lo único importante. Lo contrario es y será, como ya ha ocurrido, disparar sobre su propio pie.