Los pescadores malagueños no están viviendo uno de sus mejores veranos. La presidenta de la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores de Málaga, Mari Carmen Navas, cuenta que "el marisco tiene que llevarse a la única depuradora de la provincia, situada en Fuengirola, lo que supone un gasto de gasolina, de la propia depuración y de tiempo".
Los trabajadores de este sector en la provincia de Málaga de sienten desprotegidos y desamparados por las administraciones, debido a las restricciones y a la bajada del precio del pescado, según asegura Navas. Un ejemplo de la bajada de existencias locales en Málaga tiene que ver con las coquinas. Según apunta la presidenta de la Federación de Cofradías de Pescadores de Málaga: "De las 36.000 existencias de coquinas que había ya solo se reparten 25.000 para todo el litoral andaluz".
