La Fábrica de Cruzcampo (Trinidad Grund, 29, 29001 Málaga) rinde homenaje al poderío y a la autenticidad de El Palo, uno de los barrios de pescadores con más acento de Málaga, hecho a sí mismo y que lucha por no perder su esencia. Para ello, trae hasta el Soho, donde se ubica la microcervecería de Cruzcampo, los sabores más típicos de esta barriada con Cruzcampo Paleña, una nueva cerveza artesana inspirada en El Palo.
También en el carácter de sus gentes, como Delaossa, el rapero paleño que comenzó grabando en su cuarto y hoy es uno de los artistas nacionales con más proyección en España y Latinoamérica, llevando el nombre de “El Palo worldwide” (como él mismo reza en su perfil de Instagram). El autor de ‘La Placita’ o ‘Veneno’, acaba de lanzar el tema ‘No Te Necesito’ junto al artista argentino Dani Ribba y, a finales de este mes octubre, verá la luz su próximo EP, con siete canciones y feats. de Abhir, Easy-S, Enry K, entre otros. No obstante, Delaossa ha hecho un hueco en su agenda para unirse a Cruzcampo en este homenaje al acento de su barrio, donde se encuentran muchos lugares importantes para el artista, como el taller de su padre, el conocido pintor Josenrique. “Cuando vuelvo a casa y me reúno con mi gente de siempre, escucho sus nuevas historias y les cuento las mías tomando unas cervezas", asegura el rapero de El Palo, lugar al que siempre vuelve porque “volver a las raíces es lo que me hace encontrar mi norte entre tanta confusión”, añade.
Manoseando las raíces y la autenticidad de El Palo, los maestros cerveceros de La Fábrica han creado Cruzcampo Paleña, una Lager que “encierra todo el frescor de la brisa marina. Una cerveza rubia, con notas a pan, ligeramente afrutada y todo ello acompañando y equilibrando los toques ahumados, que iremos apreciando de menos a más según evolucione la temperatura y el paso en boca”, explica el maestro cervecero Jorge Varela. “Nos recuerda, por tanto, a los espetos de sardinas a la brasa que salpican el pintoresco paseo de El Palo y que se han convertido, indudablemente, en símbolo de la capital de la Costa del Sol. Conocidos por todos, provocan que se nos haga la boca agua y evocan el sabor a verano, días de diversión y momentos con mucho acento”, añade el maestro Jorge Álvarez.