Al parecer, la joven salió de una discoteca junto a una amiga y se separaron para coger sus coches, y cuando estaba ya en su vehículo se acercó el presunto agresor, que le pidió fuego.
Al bajarse la chica del coche, comenzó a forcejear con ella, momento en que comenzó a gritar, y sus gritos fueron escuchados por dos agentes de la comisaría del distrito Triana.
El detenido es de nacionalidad guineana y aunque no tiene antecedentes en España sí consta contra él un requerimiento de expulsión del país por estancia irregular.
El juez de Guardia decretó su ingreso en prisión provisional como presunto autor de una agresión sexual en grado de tentativa.