Una fecha, el 20 de abril, y un lugar, la cabaña del Turmo. Ambas se hicieron famosas gracias a Celtas Cortos y una de sus míticas canciones a comienzos de los años 90. Este lugar es emblemático para su autor y desde entonces también para muchas personas que acuden hasta este enclave en peregrinación.
Carlos Díaz, de Viajar por Aragón nos lleva hasta este refugio para el que hemos de ir hacia Benasque, podemos dejar el coche en el parking de Sant Jaume en el Valle de Estós y emprender el camino que nos marca la señalización del GR-11. Recorremos el camino que marca el rio Estós y vamos en ascenso durante unos 7 kilómetros. Al final del camino, veremos la Cabaña del Turmo.
Esta cabaña es una antigua cabaña de pastores, pero que todavía se utiliza por estos ganaderos cuando acompañan a sus ovejas. De hecho, si se quiere pernoctar en la cabaña, Carlos Díaz recomienda llamar previamente a la oficina de turismo de la Ribagorza para comprobar la disponibilidad, suele poderse entre el 20 de julio y el 20 de agosto. Coincidiendo con el 30 aniversario de la canción, se realizó una campaña de crowfounfing y con ella se instalaron placas solares en la cabaña para que pudiera tener luz y agua caliente