Cementerios como el de Torrero, el más grande de Aragón con obras de escultores como Palao o arquitectos como Ricardo Magdalena o Yarza y que en 2019 fue elegido como el más bonito de España, o el de La Cartuja baja, el más grande de Zaragoza y más antiguo, data de 1791 y en el se encuentran personajes como Doctor Cerrada o Lasierra Purroy. Son campos santos que se visitan no sólo para visitar a familiares o amigos en Todos los Santos, pero cada vez tienen más atractivo también para los viajeros.
El escritor Fernando Gómez, propone un “Vuelta al Mundo en 80 cementerios”, y es que, como explica, un cementerio es reflejo de la sociedad en la que está. Para Gómez es un recorrido en busca del arte funerario, hay grandes escultores que hicieron obra funeraria, por ese motivo hay que mirarlo despacio, caminando y fijándonos en las fotos antiguas, los epitafios, sentir la vida dentro de la vida.
Las visitas guiadas han proliferado en los cementerios, incluso en ciudades más pequeñas como Daroca. Son visitas que ayudan a descubrir personajes que significaron algo para esa localidad. El consejo que da Fernando Gómez para iniciarse en el necroturismo es visitar, en primer lugar, los cementerios de la localidad de cada uno, visitando las tumbas de familiares y de ahí, abrir el ámbito de visita.