'Chani' Pérez Henares trataba de conciliar el sueño una noche, en una hamaca bajo el cielo dominicano, en la época en la que formó parte de la Ruta Quetzal con Miguel de la Cuadra Salcedo, cuando reparó en que se encontraba en el lugar en el que, con toda seguridad, debieron estar en algún momento hace cinco siglos los personajes que forjaron el que, según el escritor, supuso la etapa de mayor esplendor del Imperio Español.
Pérez Henares se aleja de la leyenda negra que acompaña la colonización de América porque sólo tiene sentido juzgar los hechos de entonces con criterios contemporáneos si se hace desde la ignorancia y la estupidez. Reconoce que se cometieron atrocidades, pero también recuerda que España juzgó y castigó a sus muchos de sus responsables.
Se confiesa aterrado por la amenaza del olvido de esta hazaña extraordinaria en la Historia de España a base de ignorar los hechos y a sus artífices en los libros de texto. Sobre la novela, explica que lo más costoso ha sido poner voz y dotar de humanidad a personajes históricos, aunque existe una gran cantidad de documentación que le ha permitido crear perfiles muy precisos de sus personalidades.
