José Luis Gallego, gerente de la Cooperativa Santa Leticia, explica cómo la apuesta que realizaron por la producción del aceite y por relanzar la almazara ha resultado ser un revulsivo también para la economía de la zona, tanto es así que están realizando una ampliación y después del verano estrenaran instalaciones.
La tradición olivera está asentada en Ayerbe desde 1958, con la actual almazara, después legó la despoblación en los años 70 y 80 y fue en 1999 cuando surgieron de nuevo como cooperativa. Y no sólo con aceite, sino también con almendra y cereal..
El aceite de la zona de Ayerbe es muy especial, tanto que hace muy poco, su aceite de oliva virgen extra ha sido certificado con el sello C’Alial del Gobierno de Aragón.