Con motivo del Día del Consumidor, la OMIC, la Oficina Municipal de Información al Consumidor del Ayuntamiento de Huesca, ha hecho balance del año pasado. Tras un año de altibajos por la pandemia, los datos se van normalizado y en 2021 atendió un total 1.827 reclamaciones, en su mayor parte, un 70%, de manera no presencial. En concreto, 581 fueron de forma presencial en la oficina, 371 a través de cauces electrónicos y 900 a través de llamadas telefónicas.
Los principales motivos siguen siendo las irregularidades en las facturas y los incumplimientos de las garantías y los contratos. En cuanto a los sectores, las telecomunicaciones siguen a la cabeza con 471 reclamaciones, le sigue el sector energético con 298, el turismo con 231, el comercio electrónico con 160 y, por último, bancos y seguros.
La misma ha destacado el incremento que está sufriendo el sector energético desde el pasado mes de octubre motivado principalmente por retrasos en la facturación, ofertas engañosas y el incremento del precio. Las comunidades de vecinos están siendo algunos de los reclamadores más habituales ya que el precio para las calderas comunitarias se ha disparado.
En cuanto a la banca y los seguros, Fuertes ha avanzado el acuerdo firmado entre el gobierno central y los bancos para garantizar una atención personalizada a las personas mayores.
Si miramos a la resolución de las reclamaciones, se pudo optar por la mediación en 623 de ellas, un 34% del total, con el 75% resueltas de forma favorable al reclamador logrando un reembolso económico de 40.000 euros.
Nueva normativa
Desde la OMIC han señalado el cambio de normativa que entró en vigor el 1 de enero y que apuesta por un consumo sostenible y la economía circular. Por eso, se han ampliado los plazos de garantía postventa de 2 a 3 años, y con garantía mínima de 1 año para los productos de segunda mano. Además, se exige a los fabricantes que garanticen durante 10 años las piezas para poder reparar los productos.