El ministro de Consumo, Alberto Garzón, destacó la sostenibilidad de la cría extensiva pero criticó las macrogranjas. Sus palabras tuvieron una respuesta inmediata desde diversos ámbitos. Una de las primeras reacciones fue, en twitter, la del presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, que no escatimó en críticas.
El presidente aragonés calificó las afirmaciones de Garzón como “un insulto a la inteligencia” y aseguró que no puede ser ministro ni un día más. Además de Lambán, otras formaciones políticas aragonesas han arremetido contra Garzón. Ciudadanos, Vox, Partido Popular y Partido Aragonés han pedido también su dimisión o su cese inmediato.
El Gobierno se desmarca de Garzón
La ministra de Educación, la aragonesa Pilar Alegría, se ha referido a esta polémica en el programa Más de Uno de Onda Cero. En respuesta a Carlos Alsina, Alegría ha señalado que "es la opinión de Garzón. El Gobierno de España apoya a la ganadería y así lo demuestran los pagos de la PAC con el apoyo del sector”.
Por su parte, las organizaciones agrarias temen el impacto negativo que esas declaraciones del ministro, Alberto Garzón, pueden tener en las exportaciones de las carnes aragonesas, ya que esas palabras las pronunció en un medio de comunicación de carácter internacional.