El presidente del Comité de Expertos para la Transición Energética y el Cambio Climático de Baleares, Pau Vílchez, ha animado tanto a la ciudadanía como a las empresas, con motivo de la presentación a los medios de comunicación del 'Informe 2021-2022. El Canvi Climàtic i les Illes Balears', a "reducir la demanda energética" para "combatir el cambio climático y afrontar una transición energética justa" en la comunidad autónoma.
Según ha manifestado Vílchez este martes en una rueda de prensa, "en Baleares, los sectores que más gases de efecto invernadero emiten son dos. Por un lado, el transporte. Y, por otro, el de generación de la energía. Ambos, de manera conjunta, representaban en 2019 el 80 por ciento de los gases de efecto invernadero que Baleares enviaba a la atmósfera". Por ello, ha planteado, como "imprescindible", que ciudadanos y empresas "reduzcan la demanda energética" para "combatir el cambio climático y afrontar la transición energética".
En esta línea, además, ha planteado que "sería un error ralentizar la lucha contra el cambio climático debido a la guerra en Ucrania, por ejemplo, porque la previsión es que cada vez haya más conflictos bélicos y el cambio climático no es solo un problema de futuro, sino que ya está aquí".
Asimismo, para hacer frente a los precios de la energía, ha hecho una apuesta por incrementar la producción de energías renovables en el territorio. "En el año 2020, en Baleares, solo se generaba un 1,5 por ciento de emergías renovables, si en 2030 hay que generar un 35% es evidente que hay que acelerar. Y, hasta entonces, anualmente habría que instalar 600 megavatios (MW) de renovables", ha apuntado.
"La instalación de energías renovables en Europa ha permitido el ahorro de millones de euros", ha puesto en valor, al tiempo que ha lamentado que "quienes niegan el cambio climático son personas que no conocen bien los datos o que los conocen pero son muy irresponsables por anteponer a ellos una serie de intereses a corto plazo". "Es horroroso y peligroso que haya quien se presenta a las elecciones y niega el cambio climático".
Además, respecto al sector transportes, Vílchez ha definido como "fundamentales" una serie de medidas como "reducir el uso del coche privado, promoviendo, en las zonas urbanas, los desplazamientos a pie, en bicicleta o en transporte personal tipo patinete, y usando como último recurso los coches eléctricos". Las anteriores propuestas solo aluden al transporte terrestre, porque en lo relativo al transporte marítimo "actualmente, a penas hay alternativas, como el uso del hidrógeno" y en lo que atañe al aéreo "no hay alternativa real hoy en día". Por ello, ha considerado "imprescindible" reducir del volumen de visitantes al archipiélago balear.
"Reducir el número de visitantes es imprescindible para combatir el cambio climático", ha afirmado, advirtiendo que "la ampliación del aeropuerto de Palma pondría en peligro la supervivencia de quienes viven en Mallorca". "El cambio de modelo es imprescindible. Es necesario potenciar el sector primario, tanto de la agricultura como de la ganadería, para que estos puedan multiplicar su producción y hacerlo de una manera sostenible, porque implicará más empleo y menor dependencia de los recursos que se tienen que importar de fuera; así como fomentar el de la industria local, que ha ido disminuyendo durante los años y que hay que recuperar; y, también, el sector de producción de energía renovable, entre otros", ha añadido.
Para hacer todos estos cambios, ha señalado, "se dispone de poco tiempo, porque han de haberse llevado a cabo, a más tardar, en el año 2030, y, también, de pocos recursos económicos". Por ello, ha instado a los políticos a que las políticas que emprendan para combatir el cambio climático y hacer frente a la transición energética "sean coherentes, equitativas y justas" porque, "lo cambios que se necesita llevar a cabo, que son muy profundos y afectan a toda la sociedad, tendrán mayor impactos sobre quienes menos recursos tienen".
Con estas palabras, ha animado a todos a "implicarse", asegurando que "todas las voces tienen que escucharse" porque "las decisiones que se tomen ahora marcarán el futuro". "Es posible", ha avanzado en este sentido, que "en unos meses comience en Baleares la primera asamblea ciudadana por el clima". Pues, ha incidido, "la transición energética no se debe ver como un sacrificio, sino más bien como una oportunidad para tener una economía diversificada, que no se vea tan afectada por crisis como la del COVID".
"Hay que lograr que todo el mundo entienda que los cambios que se han de realizar supondrán una mejora en el bienestar de las personas y que la alternativa a ellos es que los efectos del cambio climático afecten a todos de una manera más abrupta. Sin duda la alternativa a estos cambios, que son necesarios, es infinitamente más dolorosa", ha terminado sentenciado Vílchez.