Son dos puestos de trabajo a tiempo completo para realizar funciones de inspección de locales, obras, espacios públicos o vados.
Según ha explicado la portavoz del equipo de Gobierno, Mariana Boadella, son agentes de la autoridad por lo que podrán solicitar y comprobar permisos, levantar actas y tramitar la documentación con el objetivo de que se cumplan las ordenanzas y las normativas municipales.
En este sentido, Boadella ha hecho balance de los informes sancionadores que se aplicaron el año pasado en Medio Ambiente. Más de 1.200 expedientes, que triplican la cantidad de 2020 y duplican la de 2019. La mitad de estas sanciones son por incumplir la ordenanza de convivencia y ocio por consumo de bebidas en la calle.
En cuanto a la ordenanza de limpieza, se tramitaron 186 sancionadores. Y por ruido hubo 222 expedientes, es decir, el doble que en 2020 y cuatro veces más que en 2019.
Por otro lado, Boadella ha subrayado que el Ayuntamiento de Ciudad Real pagó a sus proveedores en un plazo de 11 días en el período de enero a octubre del año pasado, muy por debajo de los datos del Ministerio de Hacienda cuyo promedio es de 73 días.