Masías hacía mención al compromiso de la ciudad por dar relevancia a “unos profesionales esenciales, garantes de la salud animal, del medio ambiente y de la salud pública” que han ayudado mucho, con su esfuerzo y dedicación, durante la pandemia y siempre para el bienestar de todos los ciudadanos.
El delegado de Sanidad en Ciudad Real felicitaba a toda la profesión por este reconocimiento y al Ayuntamiento de Ciudad Real, por “su especial sensibilidad” con este colectivo, del que se desconocen muchas cosas como “que es una profesión poliédrica, fundamental para la sociedad. Hay que poner en valor lo que aporta para la salud de los humanos y toda la función de ganadería, de salud pública, ya que influyen de manera muy importante para el control de las enfermedades”.
Por último, el presidente del Colegio de Veterinarios en Ciudad Real, agradecía este detalle que la ciudad tiene con la profesión porque supone un aliciente “para seguir trabajando en los centros veterinarios, explotaciones agropecuarias, en general en el medio ambiente, en curar animales de compañía, prevención de enfermedades, prevención en la calidad de los alimentos para asegurar que estos animales estén sanos y no provoquen enfermedades. Así como el cuidado de la fauna silvestre, gracias a la formación continuada y colegiada que mejoran la profesión”.
La Plaza de San Francisco de Ciudad Real se encuentra situada en un lugar muy concurrido de la ciudad y se asienta sobre un antiguo convento franciscano.